El personaje, por cierto aspirante a la alcaldía de Temixco, parece tener en el pasado reciente una serie de problemas y conflictos que lo llevaron a tomar una decisión poco inteligente, con tal de abrirse camino en sus aspiraciones, a la postre, es algo que le viene pegando mucho.
Sin embargo, hay algunos otros acontecimientos poco conocidos que llevan a considerar que con anticipación, Martínez comenzó a preparar el escenario, a fin de hacer creíble la teoría de que un familiar suyo había sido cómplice de los sucesos y eso debió pasar el primero de noviembre.
Hay datos respecto a otro supuesto secuestro, el hijo de un empresario y comerciante de Pueblo Viejo, quien tras ser privado de su libertad, fue llevado a una casa ubicada en la colonia Los Presidentes, muy cerca del centro de Temixco, pero curiosamente y por pura casualidad, la Policía Municipal llegó a dicho domicilio y se encontró con que había un secuestrado, fue liberado, pero no hubo nadie atrapado como responsable.
Los presuntos criminales utilizaron reiteradamente el nombre del sobrino del ex legislador, simulando recibir instrucciones suyas, es decir desde ahí se buscó incriminarlo, a fin de poder darle credibilidad al autosecuestro suyo, porque al menos en Pueblo Viejo se “trabajó” a fin de que la información llegara a la mayoría de la población.
El asunto es que esos antecedentes parecen cobrar mayor presencia a medida que se aproximan las decisiones en materia de candidaturas y como que le comienza a pesar a Martínez. Finalmente, ofendió a parte de su familia con los señalamientos que hizo y seguramente los afectados buscarán cobrar la factura.
AHORA SÍ, JMB CON POSIBILIDADES
En otro tema, la visita del presidente municipal de Cuernavaca Jorge Morales Barud al Congreso, para pedir apoyo a los diputados, a fin de buscar recursos para reestructurar la deuda pública que anda por arriba de 650 millones de pesos, parece tener posibilidades de prosperar.
Por lo menos eso indica la posición de algunos legisladores de oposición, quienes finalmente fueron los que no dejaron pasar la primera intentona hecha el año anterior por el edil, entre los que estarían apoyando su demanda se encuentran Teresa Domínguez Rivera y Lucía Meza, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el mismo Manuel Agüero Tovar, ahora perredista o independiente habría considerado dar su voto a favor, en tanto el coordinador de la bancada de Acción Nacional (PAN) Javier Bolaños Aguilar expresó que la petición se enviará a la comisión respectiva para su revisión, a fin de subirla al pleno.
¿Cuál es la finalidad del edil, según el tesorero Domingo Coria? Pues bajar los intereses de la deuda que andan en el 2.5% y dejarlos en 1.5%, además de prolongar el plazo de pago del monto principal, lo cual representaría ahorro significativo y daría tiempo para pagar menos intereses mensualmente.
Al alcalde le tocó un trienio por demás complicado, no sólo porque en su calidad de edil priista choca con los intereses del gobierno estatal, sino porque le entregaron un ayuntamiento casi destruido, sin dinero y con una enorme deuda por pagar. Pero eso no quedó ahí, cuando quiso buscar el apoyo del Poder Legislativo para conseguir recursos frescos, a fin de poder enfrentar el problema, le negaron la posibilidad, incluso algunos integrantes de la bancada de su partido.
Tuvo que echar mano de programas de austeridad, incluso despidiendo a parte del personal que labora en la comuna, a fin de reducir el gasto corriente, pero mientras ello pasaba, la ciudad entraba cada vez más en un estado de rezago en obra pública, prestación de servicios a la población y todas esas necesidades que tiene una metrópoli como ésta.
En el Congreso, la mayoría de los diputados se movieron de acuerdo a sus intereses partidistas o ambiciones electorales y los opositores al tricolor aprovecharon para atrincherarlo todavía más, buscando inmovilizarlo, a fin de que provocara el repudio ciudadano.
Puede ser que en cierta medida el perverso objetivo se ha logrado, sin embargo los ajustes financieros algo le han resultado y así sea a cuentagotas, ha podido superar ciertos obstáculos, la deuda la disminuyó en unos 250 millones de pesos, pero todavía es grande, más de 650 millones.
La mayoría de quienes integran la actual legislatura ya descuidaron su responsabilidad en el recinto legislativo, andan buscando otro “hueso”, en todo caso, el número de 30 está ya bastante reducido y hay algunos suplentes que igual y llegan con mejor corazón y menos intereses políticos. De ahí que Jorge Morales hiciera nuevamente el intento de lograr convencerlos, de que la negativa a permitirle reestructurar la deuda, no le pega a él sino a los ciudadanos capitalinos.
La cosa se aprecia más o menos posible, el compromiso de la mayoría de los representantes populares es volver a revisar la petición y llevarla a la tribuna, donde se votará, y bueno, seguramente que si en este intento no se alcanza el objetivo, ya no habrá posibilidades de un tercer intento, porque además entraremos en la etapa electoral, donde todo va quedando atrás y los preparativos son para integrar la siguiente legislatura, de tal forma que es ahora o nunca. Para acabar pronto, no hay mañana.
De cualquier forma, sí es de considerar que a pesar de los números rojos que presenta esta administración, heredará un ambiente menos escabroso, por lo menos con una situación manejable, pero que puede ser mucho mejor si le permiten conseguir esos fondos con los que reducirá intereses y prolongará término de finiquito.