A media semana, representantes de esa empresa denunciaron al alcalde Jesús González Otero de omitir, prácticamente durante toda su administración, el cumplimiento de este deber y las consecuencias pueden ser desafortunadas, porque le dieron tres días de plazo –que ya se están cumpliendo- para que cubra algo así como ocho millones de pesos que les debe o de lo contrario comenzarán a llevarle los desechos a su casa o al edificio de la alcaldía.
Esther Vidal Huerta, una de las representantes, comentó incluso que han venido siendo hostigados por las autoridades municipales por el solo hecho de reclamar que se cubra el adeudo, lo menos que se les advierte, es que les van a cerrar el relleno sanitario “La Perseverancia” si siguen molestando.
Ya decíamos recientemente que este problema de los desechos sólidos en la entidad es mayúsculo, que desde el gobierno del estado no se tiene un proyecto muy definido y que hay insuficiencia de espacios tecnológicamente adecuados y equipados para confinar cientos de toneladas que se generan diariamente.
Hoy entendemos que la problemática es más grande de lo que pensábamos o referíamos, porque las propias autoridades, en este caso las de Cuautla, actúan con irresponsabilidad ante algo que están obligados a enfrentar. Para empezar, el relleno suspendió momentáneamente actividades hasta recibir alguna respuesta de lo que demandan y eso llevará a los ciudadanos de la Heroica a padecer las consecuencias, podría suceder, en principio, que se suspenda la recolección en esa ciudad.
El asunto es cómo podemos pensar en un mejor servicio a la ciudadanía, cuando es la misma instancia responsable de poner orden en esa materia, la que incumple con sus responsabilidades. Seguramente el argumento es que no hay dinero, pero eso no los libera de responsabilidades.
Hay que recordar que este relleno sanitario es uno de los que se supone, de acuerdo a la Secretaría de Desarrollo Sustentable, se encuentra mejor equipado y adaptado para procesar adecuadamente los desechos sólidos, pero si no se les pagan las cuotas por el depósito, ¿cómo pueden continuar operando correctamente?
La misma SDS tiene la obligación de intervenir como mediador en el caso que nos ocupa, porque se supone es la que desarrolla medidas y estrategias, a fin de ir eliminando los “focos rojos” que existen en el ámbito de la contaminación por desechos, debido precisamente a la ausencia de una infraestructura capaz de dar cabida por lo menos a lo que se recolecta, que por lo visto, estamos bastante lejos de poder eliminar decenas de tiraderos a cielo abierto que operan sin control por todas partes en Morelos y que deben ser materia de vergüenza para quienes tienen la obligación de impedirlo.
Este no es asunto menor, los niveles de contaminación y de destrucción de las riquezas naturales en la entidad debe ser visto ya como tema prioritario, sin embargo cómo podremos pedirle al ciudadano mayor cultura y consciencia en la materia, cuando los mismos ayuntamientos rompen con las normas y abusan de sus facultades.
Es inadmisible la actitud del edil en cuestión, operar el relleno demanda de un costo, éste es cubierto a partir de las cuotas que pagan quienes lo utilizan, al no hacerlo, empujan hacia una insuficiencia que llevará a un cierre definitivo por quebranto financiero.
Tenemos entendido que incluso, una buena parte de los desechos sólidos de Cuernavaca son confinados en este sitio, de tal manera que cualquier cierre temporal, traería consecuencias más allá de la ciudad de Cuautla, independientemente de otros municipios pequeños que hacen lo propio en aquella zona oriente de la entidad.
SECUELAS DE LA ELECCIÓN
Y por otro lado, ya los tribunales electorales comenzaron a ventilar algunas impugnaciones, derivadas de resultados muy cerrados en la lucha por las posiciones que se disputaron en las urnas el pasado 7 de junio. De entrada, los panistas reaccionaron a la decisión en el sentido de que se defina la diputación local en el cuarto distrito con base en el reconteo.
Este parece ser apenas el comienzo, porque faltan por resolver algunos casos mayúsculos, que de venir bajo las mismas condiciones, generarán conflictos de mucho más alcance. Nos referimos a la impugnación que interpuso el Partido Revolucionario Institucional (PRI) contra los resultados en la elección por la alcaldía de Cuernavaca, al considerar que la mayor parte del voto fue viciado.
Qué decir de la elección en Jiutepec, donde el ex priista y ahora perredista Manuel Agüero Tovar prácticamente se robó la elección por la comuna, recurriendo, así lo afirman algunos, hasta a la quema de urnas a fin de quedarse con el puesto. Pues ahí también el tricolor recurrió a la impugnación, porque su aspirante Rafael Reyes Reyes estima que en un reconteo le da la vuelta fácilmente a su adversario.
Y como esos existen más, que las instancias competentes deberán resolver y en el corto plazo, porque en esto de las elecciones hay fechas fatales que no pueden rebasarse. Pero son las consecuencias de un Impepac que se advierte, se coludió con algunos niveles de autoridad para manipular los resultados y favorecer a determinados candidatos.
Se permitió toda clase de delitos electorales y excesos que merecen sanciones y castigos de acuerdo a la ley y si en las instancias locales no hubo voluntad para hacer respetar el voto libre y democrático, pues los afectados han tenido que recurrir a los tribunales federales, con la esperanza de que ordene la reposición de procesos, porque en lo que se refiere a la capital estatal, la exigencia es que se anulen los resultados y se llame a nueva elección.