La diferencia podría ser que en el caso que nos ocupa, los quejosos y agraviados pudieron llegar hasta la Corte. En el resto de los ayuntamientos con problemas similares, los litigios se ventilaron en los tribunales locales que no tienen la capacidad para hacer valer sus decisiones.
Bueno, recordamos que por ahí por noviembre del año pasado, se notificó a la entonces alcaldesa de Jojutla Hortensia Figueroa Peralta, quedaba fuera del cargo por omisión en el pago de laudos a empleados despedidos injustamente. La señora no hizo caso a los requerimientos, ahora es ya diputada local electa y hasta coordinadora de la bancada de su partido para la legislatura que inicia este primero de septiembre.
Es decir, en lo local existe un desprecio total a la ley en materia laboral, por eso en los ayuntamientos, buena parte de la deuda pública tiene que ver con laudos no finiquitados desde hace dos o tres trienios. Cada edil busca que quien le suceda, pague sus compromisos y se convierte en un tema nunca resuelto.
Mientras, los afectados tienen que aguantar indefinidamente a que llegue alguien con mayor consciencia y les entregue lo que en derecho han ganado, por eso estimamos que la SCJN sienta precedentes en esta materia y puede que muchos alcaldes más corran la misma suerte que Martínez Varela si no se ponen las pilas.
Es algo no privativo de los tribunales laborales, también en los penales o civiles suelen darse desacatos en los que es necesaria la intervención de las esferas federales, que son finalmente las que obligan al respeto del estado de derecho, porque aquí en corto, muchos de esos conflictos se resuelven con base en compadrazgos e influyentismo, desvirtuando el espíritu de las leyes y las normas.
INSEGURIDAD Y DESAJUSTE ECONÓMICO, OBSTÁCULOS A VENCER
En otro tema, el gobierno mexicano actual ha tenido que enfrentarse a dos grandes obstáculos que le han imposibilitado cumplir metas y compromisos en materia de desarrollo económico, la inseguridad y los desajustes económicos externos que han impactado de manera relevante en el comportamiento de las finanzas públicas y del resto de los sectores productivos del país.
En lo que corresponde a la delincuencia, el presidente de la república Enrique Peña Nieto recibió una nación enfrentada y dividida, con cerca de la mitad del territorio nacional casi en manos de grupos actuando fuera de la ley, con un nivel de violencia histórico, en entidades como Michoacán, Tamaulipas, Guerrero, Morelos, Jalisco o Nuevo León.
Desde el comienzo debió orientar la mayor parte de los esfuerzos, a fin de recuperar el control que la administración anterior, encabezada por el ex mandatario Felipe Calderón Hinojosa, había perdido. De ninguna manera ha sido cosa fácil, sin embargo, hoy parece observarse un ambiente muy distinto en la mayoría de esos estados.
Por mucho que se insista, las cosas son de mayor control y menor índice de delincuencia y ello lo vemos en los números, el ajuste de cuentas entre grupos del delito alcanzaba cifras escalofriantes, en estos momentos continúan presentes, pero de más baja intensidad. Los esfuerzos han dado frutos, aunque eso ha costado mucho dinero, pero ahora son movimientos económicos internacionales los que debilitan los pronósticos previstos en materia para el presente año y el que sigue.
La baja en el precio internacional del crudo mexicano –que parece interminable- apagó las esperanzas en la pretensión de alcanzar cerca del 3% en el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), y obligó a la Federación a reestructurar el presupuesto a la baja, sacrificando algunos proyectos anunciados. Pero paralelamente ese fenómeno adverso, comenzó a ser acompañado por una devaluación gradual del peso mexicano frente al dólar, que tampoco logra tocar fondo, por la decisión de China, de devaluar su moneda, el yuan.
Pero los negativos impactos en la economía nacional tampoco se quedan ahí, repercuten en todo el territorio y Morelos tampoco escapa, por eso a nivel local se sigue hablando de programas de austeridad y reducción del gasto corriente, como medidas iniciales para poder superar cambios previstos en el presupuesto del año venidero.
O sea, luego de cerca de tres años en el ejercicio del poder, el gobierno federal parece haber logrado recuperar la paz y tranquilidad en muchos estados, donde había una guerra declarada entre grupos mafiosos, pero no tuvo mucha tregua, el aspecto financiero comenzó a pegar bastante fuerte y ahora se le apuesta a que por lo menos, no se dé una fuga masiva de capitales, porque podría ser la puntilla.
Bueno, el conflicto magisterial, consecuencia de la Reforma Educativa, es otro tema que también le ha venido dando dolores de cabeza a las autoridades. Se ve que vienen logrando su achicamiento, ya las reacciones son menos recurrentes y se antoja que poco a poco los profesores se resignarán porque la posición es indeclinable, la reforma se mantiene, pero lo que toca a los golpes externos, estamos a merced de lo que en esas esferas siga ocurriendo, no está al alcance del gobierno mexicano enderezar el camino. Esas son las consecuencias de vivir en un mundo sin fronteras, aunque también cuando las cosas van bien fuera, aquí se ven los beneficios, pero hoy sucede lo contrario.
Como dice el dicho, parece que a Peña Nieto “le tocó bailar con la más fea” y ya estamos a mitad del camino, la esperanza es que algunas reformas, como la energética, logren atraer algunos capitales para fortalecer la generación de empleos, de no ser así, la podemos sufrir aún más.