El asunto toma singular relevancia precisamente por el lazo familiar con el abogado, sin embargo algunos datos adicionales obtenidos sobre el caso, muestran que detrás de todo ello hay un mar de fondo, que el muchacho formaría parte de un grupo de jóvenes, los que hace buen rato participan en actividades ilegales.
Uno de los agentes que intervinieron en el percance dijo a La Unión de Morelos que “Ricardo es parte de una banda de júniors que operan en la zona de Teopanzolco, encabezada por un sujeto que le apodan el ‘Dánde’ y que ya estuvo detenido por delitos graves”.
Luego agregó que “en la más reciente ocasión, lo atraparon con armas y drogas, estuvo dos años en prisión, salió y luego de ello lo balacearon en una trifulca nocturna por avenida San Diego, cerca del Rincón del Bife, en el área de Vista Hermosa”.
Y agregó que “él es quien los provee de estupefacientes y lo que acaba de pasar, se dio cuando algunos de los chavos salían de una fiesta, en una especie de arrancón con cuatro unidades, aunque se entiende que el ‘Dánde’ no estuvo ahí”. Pero igualmente dejó ver que en la camioneta con la que chocó, había algunas cosas muy interesantes. “Es lo que pudimos indagar, pero la verdad es que no sabemos de qué se trata porque no se nos permitió acceder, la revisión interna fue controlada”.
El propio agente policiaco mostró sorpresa por todo lo que hay detrás, sobre todo ante el nivel económico de la mayoría de quienes forman parte de dicho grupo de delincuencia, que descienden de familias económicamente solventes, algo que, agregó, no es muy común en esto, aunque dijo: “ese tipo de muchachos más bien suelen consumir algunas drogas, pero generalmente no están involucrados en cuestiones de distribución y ventas”.
POR CASO FOSAS, DENUNCIARÁN A LA FGJE
Y en el tema de las fosas clandestinas de Tetelcingo, Cuautla, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos (CDHEM) anunció que va a iniciar una denuncia en contra de la Fiscalía General de Justicia del Estado, por estar obstruyendo las investigaciones en relación a los cadáveres encontrados en ese lugar.
Lo que la comisión asegura, es que lejos de facilitar las cosas, a fin de ir aclarando el tema, ha hecho hasta lo imposible por impedir que se llegue al fondo, lo que pareciera mostrar que existen aspectos que no quieren que se sepan por alguna razón.
De entrada, se afirma contar con la integración completa de la mayoría de los expedientes de quienes fueron tirados ahí, pero no los muestra, además de asumir una actitud a la defensiva en contra de quienes intentan coadyuvar en las investigaciones.
Pero independientemente de eso, la inconformidad mayor es porque resulta incongruente, que siendo esta dependencia la responsable de haber sembrado ahí los 150 cadáveres, sea la que desarrolla las indagatorias, cuando debiera ser otra instancia. Es como si usted cometiera algún delito y lo comisionaran para investigarse a sí mismo, eso es francamente inadmisible, sin embargo así se viene conduciendo el asunto.
Es un caso penoso para el estado, aunque tampoco novedoso. Un legislador federal decía que esto de las fosas clandestinas es común y recurrente en la mayor parte de la república, sobre todo en aquellas entidades con alto nivel de delincuencia organizada. Bueno, en Guerrero, luego de las investigaciones en torno a la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, encontraron fosas con restos humanos por todos lados, sin embargo eso de ninguna manera significa que sea legal, por mucho que se trate de una práctica recurrente, es ilegal y sobre todo inmoral.
Pero en lo que se refiere a Morelos, no recordamos un caso similar, el hallazgo de tantos cuerpos hacinados en un solo lugar, por eso es que se le ha dado tanta importancia. Claro, desde el punto de vista externo, porque las autoridades buscan a toda costa minimizar los hechos y confundir fechas y datos sobre los depósitos.
Se insiste en que la fosa lleva ahí más de una década y por lo tanto también los restos, sin embargo no parece ser así, porque la mayoría de los cuerpos están casi completos y la descomposición no tarda tanto tiempo. Desde luego que hay responsabilidad de las actuales autoridades del estado y eso es lo que quieren impedir que se confirme.
Ahora se tiene que recurrir a la denuncia como medida para poder arrancarle a la Fiscalía General de Justicia, información que debiera haber entregado por las vías conducentes y sin mayores exigencias, claro si es que en verdad vivimos la transparencia y el estado de derecho que se presume constantemente.
Pero insistimos, en principio, la Fiscalía debió excusarse para conocer del caso, por ser juez y parte en las investigaciones no lo hizo y ello es suficiente para que, con mucha razón, se considere e incluso se dé por hecho que se esconden secretos de mucha preocupación y gravedad, en contra de funcionarios públicos del sector “justicia” que omitieron el cumplimiento de normas específicas en esta materia.
También es cierto que en algunos momentos, las ejecuciones fueron tantas que seguramente había problemas para resguardar en el Servicio Médico Forense (Semefo) a todas las víctimas, pero tampoco eso justificaba que los tiraran como animales en cualquier lado, como pasó.
El tema no está agotado, como las instancias gubernamentales del estado quisieran, hay una tregua por los festejos y vacaciones de fin de año, pero entrando el 2016 se tiene que volver a poner el asunto sobre la mesa y la denuncia que interpondrá la CDHEM será suficiente para que se le dé seguimiento y se aclaren tantas dudas e interrogantes sin respuesta al respecto, no puede ser de otra forma, ¿no le parece?