A quienes tienen horarios de tiempo completo ya se les indicó que debido a una insuficiencia presupuestal se les cubrirá su salario hasta el mes de abril. O sea, se van a llevar cuatro meses de espera laborando gratis y eso no es nada agradable para quienes viven de sus ingresos para poder atender las necesidades familiares.
Otros que también siguen castigados son los profesores de educación física, Inglés y otras ramas de la enseñanza, pero a éstos ni fecha les han dado para cubrirles la nómina. Bueno, un grupo de maestros decía que lo más aconsejable era comenzar a movilizar a la base trabajadora para poder hacer valer sus derechos y proponían iniciar con un llamado a todo el magisterio y a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), pero ya con la finalidad de buscar la renuncia del propio gobernador Graco Ramírez Garrido.
Verdad o sospecha, pero en el sector educativo hay la percepción de que el Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) es la caja chica de la administración pública estatal y que hay un saqueo sin precedentes en todas las áreas que debe ascender a los cientos de millones de pesos.
Sólo en esas retenciones salariales que le hemos comentado los montos tiene que ser cuantiosos, porque hablamos de una actividad en la que resultan miles los agraviados, pero un poco escarbándole al tema, llegamos a comentarios de los mentores respecto a que la sangría es por muchos cauces.
Se ejemplificaba con el hecho de que por tratarse de una nómina cercana a los 30 mil empleados, entre profesores, personal administrativo y de apoyo, permanentemente hay bajas y también son en números considerables y sobre ello se refería que a los que se van y dejan la plaza, los mantienen en la nómina dos o tres meses más, y su dinero es extraído por funcionarios del instituto, y de esa manera pueden desviar muchos miles de pesos.
Lo mismo ocurre cuando se dan las altas. Los interesados suelen empezar a cobrar hasta tres o cuatro meses después de haber empezado a laborar y eso si les va bien, porque conocemos de profesores que tardan hasta un año, aunque ya su clave se esté pagando.
Claro, no sabemos si es la mala fama, pero el grueso del magisterio sí cree que quienes hoy gobiernan al estado vinieron a robar, que no guardan ni las formas y que Morelos no puede permanecer pasivo ante el descaro de la corrupción.
En lo que corresponde al IEBEM tampoco sería nuevo que se utilice como caja chica. A mediados del gobierno de Marco Adame Castillo, desde el Congreso local se ordenó una intervención a fin de conocer cómo se manejaba el presupuesto educativo.
Se había logrado desmantelar el movimiento que paralizó las instituciones de educación básica a finales del 2008 y un grupo de enviados directamente del SNTE a nivel nacional se hizo cargo del instituto. Por eso quisieron ver cómo lo recibían.
Encontraron que mensualmente había un desvío promedio de nueve millones de pesos por concepto de “aviadurías”. Suponemos que debió llegarse a un arreglo con el entonces gobernador, porque nunca se dio a conocer públicamente el hecho, pero hoy se considera que ese monto es muy superior, por eso existen gigantescos problemas en la materia y a pesar de que es el rubro que más dinero se lleva del techo económico anual -algo así como seis mil millones de pesos- resultan insuficientes para atender las necesidades mínimas. Bueno, aún no cubren al sistema de preescolar de los recursos que anualmente deben recibir a fin de comprar papelería e insumos, equivalentes a unos 65 millones.
Claro, en palacio sigue habiendo confianza en exceso, se sienten intocables por los acuerdos de complicidad de Graco con el gobierno federal y los pactos con el Congreso local, pero una movilización de grandes dimensiones pudiera cambiar el rumbo de las cosas y hay quienes ya piensan en trabajar al respecto como la única posibilidad de echar fuera a la pandilla de facinerosos que tiene a los morelenses de rodillas.
En el magisterio, la mayoría de los maestros suelen ser disciplinados e institucionales, pero como que el régimen lee estas maduras actitudes de manera equivocada, cree que son agachados. No hay tal, por su formación son tolerantes, pero como que ya les están picando de más las costillas y pudieran reaccionar.
A nivel social la cosa anda bastante mal, no hay obra pública estatal por la rapiña que se está desarrollando en el gobierno. El magisterio anda con el coraje atravesado porque a unos no les pagan, a otros les deben prestaciones, al interior del mismo régimen, los empleados de la burocracia aseguran que también a ellos les picaron los ojos, porque se han llevado casi todos los fondos del instituto de Crédito, independientemente de un crédito de cerca de 100 millones de pesos y la compra de autos de 600 mil pesos para los integrantes del gabinete, dinero que no han devuelto y por eso no hay préstamos en este momento.
Con la comunidad universitaria usted ya conoce la historia: debió salirse a la calle para obligar al gobernador a devolver lo que al parecer, ya se había comido y vamos a ver si les cumplen, porque es un riesgo hacer tratos con personajes que no tienen palabra.
Hay una verdad absoluta e innegable, éste gobierno se fue quedando sin apoyo social más o menos a partir del segundo año de administración, porque a las elecciones del siete de junio del año anterior, ya llegó tronado, debió comprar a precio de oro la mayor parte de las posiciones ganadas en lo que toca a diputaciones locales federales y ayuntamientos y en algunos casos, ni así, como en lo referente a Cuernavaca, donde el candidato de Graco, Jorge Messeguer Guillén quedó en cuarta posición.
Pero el escenario actual es todavía mucho más adverso, porque el rechazo se viene convirtiendo en repudio, así que no se descarta alguna fuerza social surgida desde abajo y vemos condiciones bastante preocupantes en lo referente al magisterio, que al igual que la UAEM, son muchos y no andan nada contentos.