Con un trago amargo se fue el entrenador de los cañeros, después de la dolorosa derrota (1-3) en el partido de ida de la final ante Alebrijes Oaxaca. Los morelenses recibieron dos anotaciones en los primeros cinco minutos y a partir de ese momento fue una losa pesada para la escuadra albiverde.
“Las dos primeras jugadas de ataque del rival nos aciertan, nos convierten, fueron dos errores en los recorridos y es un golpe duro en una final, dos golpes de desventaja es un golpe duro, nos llevó un tiempo recomponernos y volver a meternos en el partido después de ese golpe. A partir del minuto 30 empezamos a tener el control, apretar y tener profundidad.
“El segundo tiempo el equipo hizo lo correcto, se posicionó en campo contrario, empezó a ganar los duelos por banda, generó muchas situaciones y la diferencia está en la efectividad; Alebrijes fue efectivo y nosotros no.
“Todavía hay mucho camino por recorrer, plantearemos una estrategia para ir a ganar a Oaxaca. Tenemos jugadores que pueden generar desequilibrio”, finalizó Valiño al hablar con los medios de comunicación en la rueda de prensa después del partido en el “Coruco” Díaz.