La fiscalía anticorrupción aseguró que se les había perdido el expediente acusatorio.
En una larga y controvertida audiencia, el juez de control del Tribunal Superior de Justicia de Morelos, Natanael Subdias Aguilar, ordenó el retiro de la sala de juicio oral del nuevo titular de la fiscalía anticorrupción, Isaías Rodríguez Moreno, luego de que confirmó el “extravío” de la carpeta de investigación en la que se acusaba al fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara, del presunto delito de tortura agravada en contra de un detenido.
Rodríguez Moreno, quien se presentó a la audiencia inicial junto con una agente del Ministerio Público apenas unas horas después de haber asumido la titularidad la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), planteó al juez el desistimiento de la solicitud de formulación de imputación contra Carmona Gándara, quien compareció ante la autoridad jurisdiccional local vía telemática, en virtud de que aún permanecía en prisión preventiva justificada en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
El argumento del nuevo fiscal anticorrupción fue que la mañana de este jueves fueron cesados varios servidores públicos de esa institución, entre ellos Ignacio Zeus Gutiérrez Córdoba, agente del Ministerio Públicos que tenía en su poder la carpeta de investigación del fiscal Uriel Carmona, y Edgar Núñez Urquiza, quien se desempeñaba como vicefiscal anticorrupción, lo que les impidió estar en condiciones de enfrentar la audiencia y porque no encontraban el expediente.
El juez de control ordenó el retiro de la sala de la representación de la fiscalía anticorrupción por considerar que, al no presentarse con la carpeta de investigación, no tenía elementos para el debate. Aunque hubo renuencia de la representación social, finalmente fue retirada en medio de la presencia de elementos de la Secretaría de la Marina.
Sin embargo, en la audiencia se apersonó Juan Carlos Chávez Jiménez, en su calidad de Fiscal Especial contra la Tortura de la Fiscalía General de la República (FGR), quien sustituyó la representación de fiscalía local y solicitó la atracción de la causa y pidió al juez local poner en conocimiento de la FGR el extravío del expediente JC/501/2023, por parte de los funcionarios de la fiscalía anticorrupción, ante la posibilidad de que se trate de un conflicto de intereses o un acto de corrupción.
La audiencia inicial comenzó cerca de las 15:00 horas y, hasta pasadas las 22:00 horas, el juez había realizado cuatro recesos y continuaba el debate entre las partes para definir la situación jurídica del fiscal de Morelos, quien incluso llegó a solicitar su traslado a Morelos para presentarse físicamente ante el juez ante varias fallas en la transmisión vía internet de su comparecencia y que consideró obstaculizaban su debida defensa.
El fiscal estatal Uriel Carmona Gándara ha sido vinculado a proceso en tres ocasiones por jueces de control de la Ciudad de México, luego de que la fiscalía capitalina lo imputó por los presuntos delitos de retardo en la justicia, encubrimiento por favorecimiento y feminicidio en calidad de auxiliador en el caso de la muerte de la joven Ariadna Fernanda.
Pese a que en las tres causas penales se le dictó prisión preventiva justificada y tribunales colegiados le otorgaron suspensiones para enfrentar en libertad los procesos penales –bajo el supuesto de que cuenta con fueron constitucional-, la FECC de Morelos ejecutó la noche del miércoles en el penal de máxima seguridad del Altiplano una cuarta orden de aprehensión por el presunto delito de tortura agravada –el cual se persigue de oficio- en agravio de Luis Alberto “N”, alias “El Diablo”, quien fue detenido por su presunta implicación en el secuestro y asesinato de tres trabajadores del Instituto Nacional de Salud, cuya sede se encuentra en Cuernavaca.
Por deficiencia probatoria de la Fiscalía General del Estado (FGE), el pasado 25 de abril una juez de control decretó la no vinculación y ordenó la liberación de Luis Alberto “N”, quien –según la propia fiscalía- es miembro del grupo delictivo que opera en los poblados de Tres Marías, Parres, Fierro del Toro, y en las lagunas de Zempoala dedicada al robo de vehículo, la tala clandestina y el secuestro.
Dos días después de su liberación, a través de redes sociales, se difundió un video en el que Luis Alberto “N”, acusaba al fiscal estatal, Uriel Carmona Gándara, de fabricación de delitos, de proteger a un capo llamado “Erick criminal” y de haberlo torturado para auto incriminarse.
Por este caso es que Carmona es imputado nuevamente y se espera que en las próximas horas se defina si el fiscal es liberado o si permanece en prisión preventiva justificada.