Operador dice que ha sido víctima de seis asaltos; la colonia más peligrosa es la Carolina
Adán Montes dice que desde hace 25 años trabaja como operador en la Ruta 1 y ha observado que desde hace diez años los ingresos económicos de la organización disminuyeron de manera considerable y no han logrado recuperarse por temas como el sismo de 2017 y ahora la pandemia de covid-19.
A decir del trabajador del volante, en comparación con el año pasado -cuando empezó la pandemia- sí han visto una mejoría en su economía porque los estudiantes regresaron a las clases presenciales, pero no tanto como para poner a trabajar todo el parque vehicular, por lo que de las 69 unidades con las que cuenta la Ruta 1, sólo 40 están en circulación.
“Antes ganábamos muy bien; yo diría que ganábamos como dueño de la ruta porque sólo teníamos que entregar la cuenta y pagar el combustible, y lo demás era para el chofer, pero ahora con el sistema de barras nos tocan de 200 hasta 600 pesos”.
Además del temblor y de la contingencia sanitaria señaló que la inseguridad es otro factor que sigue afectando a los transportistas. A pesar de que las autoridades de seguridad han implementado recorridos en zonas de mayor peligro, en la colonia la Carolina registran hasta dos asaltos al transporte público por día.
En los 25 años que lleva al volante -dijo- ha sido víctima de seis asaltos, pero el que más recuerda ocurrió hace quince años en la Carolina, donde dos sujetos armados asaltaron a los pasajeros e hirieron a uno que se resistió a entregar una cadena.
“Primero fue el susto, porque escuché el balazo muy cerca y luego una niña empezó a llorar; pensé que la habían agredido, pero después vi que un hombre herido bajó de la ruta; le dispararon en el hombro porque se resistió y cuando llegamos a la Pradera los policías me pidieron los documentos y más adelante detuvieron a uno de los asaltantes”, expresó Adán.
De su trabajo como operador contó que todavía hay quienes se niegan a usar el cubrebocas, lo cual ha ocasionado que los elementos de tránsito le llamen la atención, por permitir el ingreso de personas que no cumplen con las medidas sanitarias.