Ante las manifestaciones de docentes jubilados y transportistas que han provocado caos vial en el Centro Histórico de Cuernavaca y la periferia, señaló que la libre manifestación es un derecho consagrado en la Constitución federal y de ninguna manera puede ser sujeto a inquisición.

Dijo que si bien “en el momento en que personas se manifiestan en marcha, paro o mitin, las principales afectaciones son la vialidad, sin embargo, eso no vulnera el derecho al libre tránsito; el libre tránsito va dirigido a las personas, no a los automovilistas, tú puedes transitar libremente por esos lugares y no se está violentando ese derecho”.

Expresó que aun cuando derivado de estas manifestaciones o protestas haya afectaciones a terceros, las autoridades del nivel competente están obligadas a implementar medidas, no sólo para garantizar la seguridad de los inconformes y que las protestas se realicen pacíficamente, sino para aminorar las repercusiones al tránsito vehicular.

Dijo que en estos casos, las autoridades “tienen que implementar las medidas para despresurizar” la vialidad y ofrecer vías alternas a los automovilistas, “porque las marchas no pueden ser objeto de represión, ni de ninguna situación de esa naturaleza”.