Desde que te reciben hay una atmósfera de misterio en el lugar. Un color va a determinar con quien compartirás la misión, y la sobremesa. ¿Te suena raro? Pues sí, yo tampoco me imaginaba bien cómo sería la experiencia de tener que descubrir al culpable de un crimen mientras ceno a lado de 9 personas desconocidas.
El viernes pasado tuve la oportunidad de asistir a la primera Cena con Delito que se lleva a cabo en México, gracias a la Sociedad Dante Alighieri que, en su misión de promoción de la cultura y la lengua italiana, ahora nos acerca esta fusión entre teatro, gastronomía y misterio que ya es toda una tendencia en Italia y otros países de Europa.
La Cena con Delito —o Murder Party- es un juego basado en el género de
la novela de misterio que solo puede resolverse con la intuición de un detective. Se trata de un juego basado en el género de la novela de misterio que busca ofrecer una experiencia digna de un thriller a 40 comensales. Debes cubrir dos requisitos indispensables: ser amante de los misterios y de la comida.
No puede ser un evento masivo justo porque se trata de una experiencia interactiva en la que las pistas se van descubriendo poco a poco mientras los actores también cenan y brindan, como los asistentes.
Cuando todo comienza ni siquiera se sabe cuál de todos los personas que tienes alrededor será la víctima del crimen, mucho menos quién de todos es el sospechoso de cometer el delito.
Esta primera Cena con Delito se llevó a cabo en las instalaciones de la Sociedad Dante Alihieri, ubicadas en una vieja casona de la colonia Juárez, en la Ciudad de México, lo cual le añadió atmósfera de época a la escena de la que todos los comensales fuimos parte.
Mientras se nos iban revelando las pistas y la trama de la historia, los meseros iban llegando con cada uno de los cuatro tiempos del menú diseñado y cocinado por el Chef Guiseppe de Pasquale.
Aunque este movimiento de teatro interactivo fusionado con gastronomía es actualmente una moda europea, lo cierto es que no es algo nuevo pues lleva ya más de dos décadas en el gusto de los amantes de los juegos y los misteros.
Se trata de un movimiento que surgió en los años 80 en países anglosajones y pronto se extendió por toda Italia. Actualmente estas cenas se organizan en ciudades como Roma, Milán, Nápoles y Florencia. El objetivo en todas las ciudades es el mismo: descubrir quién es el asesino.
Teniendo como protagonista al giallo (género literario de misterio en Italia), los invitados se sumergen directamente en una historia interactiva. En ocasiones los mismos los mismos comensales son los personajes, a veces actores caracterizan papeles thrillers estimulando la creatividad de los invitados. La Cena con Delito es pues, un ejercicio de preguntas: ¿quién es el asesino, y qué motivos tuvo para cometer tal crimen? Descubrirlo no siempre es simple, de hecho es bastante complejo pues se le agrega el hecho de que no conoces previamente a las personas con las que harás equipo para la misión.
Nosotros estuvimos realmente cerca, en mi equipo, pero nos ganaron los de otra mesa. Ellos se llevaron el premio que en realidad es importante porque las reglas dicen que debe ser uno con sabor a tradición: un buen salami, una botella de vino y un queso bien sazonado.
Los actores alternan el desarrollo de la historia durante el transcurso de la cena, los asistentes tendrán que resolver el caso reuniendo las pistas proporcionadas, interrogando a los sospechosos, reconstruyendo la escena del crimen. Normalmente, los actores-personajes presentan sus historias a los invitados en varios actos, dando
pequeñas pistas sobre el asesinato, lo cual torna interactivo el recinto ya que cualquier objeto y cada espacio podría ocultar detalles relevantes para el desarrollo de las investigaciones. A veces, incluso los platos ayudarán a detectar indicios y pistas nuevas a seguir.
“En Italia la Cena con Delito está de moda, sin embargo, lo que sigue siendo el centro de esto es la comida, las delicias gastronómicas que acompañan a los juegos. Como suele suceder en la península mediterránea, este evento, además de tener una finalidad lúdica, es otra excusa para comer mucho y sabroso”, relata Luca Galizia, director de la Sociedad Dante Alighieri. “Sin duda, llevar a cabo eventos como la Cena con Delito, recitales de piano o exposiciones de arte italiano, por mencionar solo algunos de los eventos culturales que llevamos a cabo a lo largo del año, es una forma de compartir la cultura italiana en este país, con nuestros alumnos, pero también con el público en general que gusta de conocer un poco más de Italia”.
Algo gratamente sorprendente fue la calidad histriónica de los actores de la Academia de Florencia —que aunque con ese nombre pueda despistar, está en México- quienes animaron la cena representando personajes llenos de enigmas y misterios por resolver y con sus caracterizaciones nos remontaron a los años 40.
Por supuesto no les voy a decir de qué trata el misterio, ni mucho menos quién es el asesino pues aún hay dos fechas más para vivir esta experiencia con la misma historia durante marzo y abril. Para mayo, ya se hará con una historia distinta pero siempre se buscará resolver un crimen.
Lo único que diré es que el viernes aprendí, mientras comía y bebía, que una persona sí puede ser asesinada más de una vez… resuelvan el acertijo en la próxima Cena con Delito.