Aarón reparte comida para pagar sus estudios.
Para poder solventar sus gastos en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) -donde estudia para ingeniero en Desarrollo Rural- hace cinco meses Aarón empezó a trabajar como repartidor de comida por medio de las plataformas digitales.
Por la flexibilidad en el horario que manejan las plataformas -que prestan el servicio de reparto de alimentos- decidió registrarse, ya que a veces solo tiene clases cinco horas por la mañana.
Dijo que cuando labora medio día reúne entre 200 y 280 pesos, pero de viernes a domingo sus ingresos se incrementan hasta 400 pesos en una jornada de nueve horas.
El dinero que obtiene lo utiliza para solventar sus gastos en la universidad y para su alimentación, aunque siempre guarda cien pesos al día para comprar gasolina.
Aunque hasta la fecha ninguno de sus clientes le ha quedado a deber, sí se ha encontrado con varias personas que hacen el intento de no pagar, con el argumento de que en su pedido hacen falta cubiertos, servilletas y aderezos.
“Algunas personas quieren buscar algún desperfecto en la comida para no pagar o no pagar completo, dicen que su pedido está incompleto solo porque en el restaurante no agregaron bolsas de catsup, servilletas o tenedores”, expresó.